Gatos con ataxia: lo que los propietarios deben saber
La ataxia puede ser causada en un gato por diversos desencadenantes y manifestarse con una serie de síntomas. Especialmente notorias son las alteraciones en la coordinación, como un caminar inseguro y caídas ocasionales, razón por la cual los dueños a veces llaman a sus gatos afectados por ataxia "gatos tambaleantes".
Aunque a primera vista no lo parezca, para un gato con ataxia es frecuentemente posible llevar una vida normal sin grandes impedimentos. A continuación, le explicamos cómo puede ayudar a su mascota en este proceso.
Gato con ataxia: ¿qué significa eso?
La ataxia felina es una discapacidad, donde bajo el término general de ataxia se agrupan diversas alteraciones de la coordinación en los gatos.
Por lo tanto, las causas y la manifestación pueden ser diversas. Sin embargo, todos los gatos con ataxia tienen en común que no pueden controlar adecuadamente sus músculos, lo que resulta en movimientos descoordinados.
Síntomas típicos de un gato con ataxia
Los gatos con ataxia sufren especialmente de trastornos del equilibrio, por lo que no tienen una postura segura y a menudo se caen fácilmente. Además, su marcha es rígida y tambaleante, y sus patas delanteras suelen estar excesivamente extendidas, mientras que las traseras están notablemente dobladas al caminar.
Otros síntomas que pueden indicar ataxia en gatos incluyen, por ejemplo:
- Tropiezos y titubeos frecuentes
- Sensibilidad a los ruidos
- Trastornos de la conciencia y percepción
- Problemas con la visión espacial
- Cabeza inclinada o temblores
- Temblores en los ojos
Cómo se produce la ataxia en los gatos
Cuando un gato sufre de ataxia, hay diversas razones que podrían estar detrás de ello. Con frecuencia, las lesiones del sistema nervioso central son responsables de la ataxia.
Además, también pueden contribuir a la aparición de la ataxia en gatos accidentes, defectos genéticos, enfermedades infecciosas, así como deficiencias nutricionales y trastornos metabólicos.
Diferentes tipos de ataxia en gatos
Existen varios tipos de ataxia que pueden presentarse en gatos, y su clasificación depende del desencadenante responsable de los trastornos de coordinación. La ataxia sensorial, cerebelosa y vestibular son especialmente comunes en los gatos.
Ataxia sensorial en gatos
La causa principal de la ataxia sensorial son los daños en la médula espinal. Estos pueden surgir, por ejemplo, debido a enfermedades articulares, una columna vertebral deformada o lesiones en la médula espinal.
La ataxia sensorial se manifiesta en los gatos principalmente mediante debilidad muscular, movimientos descoordinados al caminar y una posición anormalmente amplia de las patas delanteras y traseras.
Ataxia cerebelosa en gatos
La ataxia cerebelosa, que es frecuente en gatos, es consecuencia de daños en el cerebelo, responsable de coordinar los movimientos.
A menudo, es el resultado de una infección en gatas gestantes con panleucopenia felina, lo que afecta al desarrollo del cerebro de los gatitos no nacidos y provoca anomalías en los animales afectados desde una edad temprana.
No obstante, también es posible que la ataxia de este tipo se presente en gatos más adelante debido a envenenamientos, enfermedades tumorales o accidentes.
Gatos con ataxia vestibular
La ataxia vestibular en gatos es consecuencia de daños en el órgano del equilibrio, que pueden ser causados, por ejemplo, por una inflamación del oído interno o una enfermedad de los nervios que conectan el cerebro con el oído interno del cuadrúpedo.
Los síntomas característicos de esta forma de ataxia incluyen especialmente la inclinación de la cabeza, caídas regulares y temblores en los ojos.
Cómo diagnostica el veterinario la ataxia en gatos
Los trastornos en los movimientos asociados con la ataxia no deberían pasar desapercibidos para ningún dueño de gato. Los veterinarios experimentados, gracias a los síntomas a veces bastante diferentes, pueden incluso reconocer la forma exacta observando al animal.
No obstante, es necesario examinar al gato con más detalle. Además de utilizar técnicas de imagen, el veterinario también puede realizar mediciones de la actividad muscular y cerebral.
Además, es probable que examine a su compañero de cuatro patas en busca de diversas enfermedades de gatos como la panleucopenia felina para descartar o tratar estas como la causa de los síntomas.
Ataxia en gatos: tratamiento y pronóstico
Es esencialmente imposible predecir las consecuencias exactas que la ataxia tendrá en su gato. Si el veterinario ha diagnosticado una ataxia cerebelosa, al menos puede asumir que el estado de su gato no empeorará normalmente. Si no hay otras enfermedades, incluso podría haber una mejora parcial en la condición.
En este caso, su gato puede llevar una vida relativamente normal sin mayores limitaciones en términos de calidad de vida. Sin embargo, para que esto sea una realidad, su mascota necesita su apoyo.
Lo que los dueños de gatos con ataxia deben tener en cuenta
El riesgo de lesiones es naturalmente alto en gatos con ataxia, por lo que ciertas precauciones son imprescindibles. El acceso al exterior está, por supuesto, fuera de discusión para los animales afectados.
En su lugar, es importante hacer que la vida diaria del animal como gato de interior sea lo más cómoda y segura posible. Asegure las escaleras y los muebles a los que el gato pueda subir para evitar caídas y lesiones relacionadas.
También es recomendable instalar alfombras, ya que proporcionan más agarre al gato al caminar. Además, los platos de comida y agua elevados, así como una caja de arena con tapa, pueden ser un gran alivio para el día a día, ofreciendo apoyo.
Entrenamiento y juegos para su gato con ataxia
Si su gato sufre de ataxia, los juegos de habilidad y el entrenamiento vocal pueden ayudar a promover la coordinación motora y fortalecer los músculos del animal.
Aunque no debe esperar milagros de sus esfuerzos, este enfoque a menudo puede mejorar significativamente el estado de los gatos con ataxia. Por lo tanto, vale la pena tener paciencia y brindar la atención necesaria a su mascota.
Ataxia en gatos: nuestra conclusión
Como puede ver, el diagnóstico de ataxia no significa necesariamente que su gato no pueda llevar una vida valiosa. Si bien la vida diaria difiere en muchos aspectos de la de la mayoría de sus congéneres, como dueño, debe tener consideración con su compañero de cuatro patas.
Sin embargo, un gato con ataxia es un compañero muy especial, tan encantador como cualquier animal completamente sano.
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